Tras los atentados ocurridos este martes en diferentes sectores de la ciudad, la Alcaldía de Cali y la Gobernación del Valle del Cauca adoptaron medidas extraordinarias para proteger a la población y contener cualquier nueva amenaza.
Los ataques, perpetrados con artefactos explosivos en los barrios Meléndez, Manuela Beltrán y Los Mangos, dejaron un saldo de dos personas fallecidas y 43 heridas. Ante la gravedad de la situación, se llevó a cabo un consejo de seguridad extraordinario con participación de la Fuerza Pública y las autoridades locales.
Entre las decisiones adoptadas se encuentra el cierre obligatorio de establecimientos de comercio desde las 9:00 p.m. del martes 10 de junio hasta las 6:00 a.m. del miércoles 11 de junio. La medida excluye el servicio a domicilio. Además, se decretó Ley Seca desde las 9:00 p.m. de hoy hasta la medianoche del miércoles 11.
El despliegue policial se incrementará en las vías principales y accesos a la ciudad, mientras que la red hospitalaria de Cali y del Valle ha sido puesta en alerta naranja, en previsión de nuevos hechos violentos.
El alcalde Alejandro Eder anunció una recompensa de hasta $300 millones por parte de la Alcaldía, y otro tanto ofrecido por la Gobernación del Valle, por información que permita anticipar o esclarecer ataques terroristas y capturar a los responsables. Los ciudadanos pueden comunicarse de manera confidencial a la línea 3213945156.
“Estos ataques no son hechos aislados. Son acciones cobardes de estructuras criminales que operan libremente desde el norte del Cauca y el Valle. Como lo he dicho una y otra vez: Cali no puede enfrentar sola esta amenaza. La seguridad es responsabilidad del Estado colombiano. Es hora de que el Gobierno Nacional actúe con toda su fuerza. ¡Con toda!”, manifestó Eder.
Además, los mandatarios del Valle enviaron una carta al presidente Gustavo Petro, exigiendo la implementación urgente de una estrategia integral de seguridad, especialmente ahora que el presidente visita la ciudad. En la misiva solicitaron la realización de un consejo de seguridad nacional, con enfoque en la articulación institucional ante el aumento de ataques terroristas.
“Hoy más que nunca se hace indispensable que el Gobierno Nacional escuche y atienda las solicitudes reiteradas que hemos elevado desde el nivel territorial. Necesitamos acciones decididas e integrales que permitan asumir el control de la región y garantizar la tranquilidad de los vallecaucanos”, expresa el documento.
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