La ciudad de Medellín ha dado un paso significativo hacia la preparación ante emergencias al participar activamente en el Simulacro Nacional de Respuesta a Emergencias, organizado en todo el país por la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo. Un total de 63,561 personas se unieron al ejercicio, que se llevó a cabo en octubre, el mes de la reducción del riesgo de desastres.
Este simulacro, diseñado para evaluar la capacidad del Distrito frente a varios fenómenos amenazantes como sismos, movimientos en masa, avenidas torrenciales y incendios estructurales, contó con la participación de instituciones públicas y privadas, empresas, sedes de Buen Comienzo, instituciones educativas y la comunidad en general. Medellín no solo cumplió sino que superó las expectativas al incorporar 1,237 entidades en el ejercicio, incluyendo 400 empresas, 327 instituciones educativas públicas y privadas, y 273 sedes de Buen Comienzo.
Bajo la coordinación del Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres (Dagrd), se llevaron a cabo simulacros que pusieron a prueba los planes de gestión del riesgo de desastres de diversas organizaciones en la ciudad. La directora del Dagrd, Laura Duarte, elogió el esfuerzo conjunto de todas las dependencias y secretarías de la Alcaldía de Medellín y destacó la importancia de construir una cultura de simulacro para preparar a la ciudad ante emergencias.
Durante el simulacro, se activaron tres estaciones de bomberos con 20 unidades, así como organismos de socorro como la Cruz Roja, Defensa Civil, el grupo Apolo y Rescate Garsa. Además, los equipos técnico y social del Dagrd estuvieron en acción, garantizando una respuesta eficiente a situaciones simuladas.
En las simulaciones realizadas en Medellín, se incluyó una avenida torrencial en la quebrada Santa Elena, en las comunas Villa Hermosa y Buenos Aires, con activación del Sistema de Alerta Temprana Comunitaria y encendido de alarmas. Además, se simularon incidentes como un choque vehicular en el sistema Metroplús con tres personas lesionadas y una fuga de combustible en el Complejo Industrial La María.
La participación activa de la comunidad, incluyendo niños menores de cinco años, fue destacada por la directora del Dagrd. Este ejercicio, el segundo del año después del simulacro de evacuación por sismo en agosto, no solo ha evaluado la preparación de la ciudad para emergencias, sino que también ha fortalecido la conciencia comunitaria sobre cómo enfrentar situaciones de crisis.
Octubre, como el mes de la reducción del riesgo de desastres, continuará viendo esfuerzos intensivos del Dagrd para aumentar la conciencia en las comunidades, con el objetivo de divulgar las mejores prácticas y garantizar que cada persona esté equipada para tomar decisiones informadas y seguras en caso de emergencia.
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