En una contundente declaración al término del primer consejo de seguridad de su gestión, el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, anunció una serie de medidas audaces para combatir la criminalidad en las subregiones del Nordeste y Magdalena Medio.
En un llamado sin precedentes, Rendón afirmó: "Todos los bandidos tendrán precio en este Gobierno departamental". Como parte de la primera gran conclusión del consejo, el mandatario propuso la reactivación de un ambicioso plan de recompensas, abarcando desde informantes hasta cabecillas, con el objetivo de desmantelar las redes criminales que afectan al Departamento.
Audio: Andrés Julián Rendón, gobernador de Antioquia.
La segunda estrategia destacada se centró en fortalecer la colaboración entre la Fuerza Pública y la ciudadanía. Rendón instó a los alcaldes a trabajar estrechamente con las comunidades, convocándolos a ser "los ojos de los soldados y los policías en la calle". Se propone la creación de frentes de seguridad ciudadana no armada para consolidar la seguridad en todo el departamento.
En un giro impactante, el gobernador reveló la tercera medida: la identificación y demolición de casas de vicio en una ofensiva directa contra el microtráfico, señalando que estas son el "gran articulador" de diversas expresiones delictivas locales.
En la lucha por fortalecer el pie de fuerza, Rendón abogó por incentivar la entrada a la Fuerza Pública, sumándose a la gratuidad anunciada por el Gobierno Nacional. Propuso asignaciones económicas adicionales para aquellos que decidan prestar servicio a la patria.
Con estas decisiones, el gobernador busca no solo enfrentar los desafíos de seguridad, sino también construir una alianza sólida entre autoridades, ciudadanos y fuerzas de seguridad. El próximo paso en esta ofensiva será el segundo consejo de seguridad programado para el jueves 4 de enero en el municipio de Andes, dirigido a la subregión del Suroeste antioqueño.
