- “Las lluvias nos permitieron llevar un episodio en mejores condiciones, pero también activaron episodios de gestión de riesgos, asociados a socavaciones, deslizamientos y riesgos en nuestras cuencas.”, afirmó el director del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, Juan David Palacio Cardona.
- Durante las tres semanas consideradas como críticas durante el episodio, solamente una estación presentó calidad del aire Dañina para Grupos Sensibles durante unas horas.
- La poca afectación a la calidad de aire del Valle de Aburrá en este segundo período de gestión se debió, en gran parte, a la reiterada ocurrencia de lluvias nocturnas de gran extensión sobre el territorio metropolitano.
El director del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, Juan David Palacio Cardona, señaló que la evolución de los niveles del contaminante PM2.5, durante este segundo período de gestión de episodios de calidad de aire de 2022, coincidió con lo proyectado inicialmente en el calendario.
“Durante los 18 días del episodio, solo en una oportunidad tuvimos una estación con índice de Calidad del Aire (ICA) naranja. Eso se debe a las intensas lluvias que se generaron durante octubre, lo que nos permitió llevar un episodio en mejores condiciones”, afirmó Palacio Cardona.
Según indicó el Proyecto Siata, fue la estación Pedro Justo Berrío, localizada en el sector de Belén Las Mercedes, suroccidente de Medellín, la cual reportó niveles correspondientes a Dañinos para Grupos Sensibles (ICA naranja) por un período de 9 horas aproximadamente, el día 13 de octubre.
La poca afectación a la calidad de aire del Valle de Aburrá en este segundo período de gestión se debió, posiblemente, al incremento de las lluvias asociadas al fenómeno de la Niña y a la reiterada ocurrencia de lluvias nocturnas de gran extensión sobre el territorio metropolitano.
En efecto, el proyecto Siata, del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, argumentó que “estas situaciones producen una disminución de la incidencia de material particulado asociado a incendios y favorecen las condiciones de lavado atmosférico por precipitación local”.
Las proyecciones realizadas por el proyecto SIATA en septiembre del 2022 indicaban que el segundo período de gestión de episodios de calidad de aire del año estaría definido por un calendario donde la primera semana, del 10 al 15 de octubre, tendría asociada una probabilidad media-baja para que cinco o más estaciones poblacionales presentaran un ICA naranja, mientras que para las dos semanas siguientes esa misma probabilidad sería baja. Así mismo, se consideró para la semana del 10 al 15 de octubre una probabilidad baja de ICA rojo durante un día en al menos una estación.
Sobre las razones de la poca afectación de fuentes externas al episodio, la subdirectora Ambiental del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, Diana María Montoya, indicó que en octubre de 2022 hubo una alta acumulación de lluvia en gran parte de Suramérica, en especial en los Llanos Orientales, y en las cuencas de los ríos Orinoco y Amazonas.
Las mediciones de Siata indicaron que la región ha experimentado, para los meses de septiembre y octubre de este año, acumulados de precipitación con valores superiores al 30% de los promedios históricos.
“Esta situación coincidió con una reducción significativa en el número de puntos calientes en Suramérica y los Llanos Orientales, asociados a incendios para la misma región y es probable que estas lluvias hayan favorecido a la reducción de la afectación directa por incendios de cobertura vegetal en la calidad del aire de la región metropolitana”, dijo Montoya Velilla.
Por otra parte, los equipos de medición de black carbon mostraron que la contribución por quema de biomasa en la región fue en promedio menor al 10% durante todo el episodio.
Operativos fuentes móviles y fijas
Durante los 18 días que duró el episodio de gestión de calidad del aire, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá realizó 5.422 acciones de control en fuentes móviles (vehículos), en articulación con las diez alcaldías del territorio.
En lo corrido del 2022, con fecha de cierre a 28 de octubre, la entidad ha llevado a cabo 58.835 operativos: 44.294 vehículos (75%) pasaron la prueba y 14.541 (25%) fueron rechazados. También se realizaron 11 operativos de control a fuentes fijas.