En un anuncio clave para la sostenibilidad ambiental del Valle de Aburrá, el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez Zuluaga, reveló que se destinarán $91 mil millones a la intervención de los puntos críticos del río Aburrá Medellín y sus afluentes. La inversión será ejecutada a través del Área Metropolitana y busca recuperar la salud del principal eje hídrico de la ciudad.
“Hace muchos años no se hacía una inversión seria en el río. Vamos a empezar desde la parte alta del nacimiento en el Alto de San Miguel en Caldas”, afirmó el mandatario, destacando la importancia de atender de forma urgente los tramos más vulnerables del afluente.
Además de esta inversión histórica, el alcalde anunció la ejecución de diez obras de mitigación en distintos sectores del Distrito, las cuales iniciarán en los próximos meses con el objetivo de reducir el riesgo en comunidades expuestas a emergencias por crecientes súbitas y deslizamientos. Entre los antecedentes de este tipo de intervención está la reciente recuperación de la quebrada Malpaso en Robledo.
Paralelamente, Gutiérrez reiteró el compromiso con la estrategia Guardaquebradas, una iniciativa que contará con cerca de 400 cuidadores comunitarios distribuidos en el territorio, encargados de preservar las más de 4.200 fuentes hídricas del Distrito, que se extienden a lo largo de 1.888 kilómetros, incluyendo 51 corrientes principales.
“Estas personas, muchas de ellas mayores de 54 años o integrantes de programas sociales como Parceros, y representantes de comunidades indígenas Katío, Chami y Zenúes, van a mantener limpias las fuentes hídricas, cuidarlas y formar a los vecinos como gestores ambientales”, explicó el alcalde.
La estrategia no solo representa una apuesta por el medio ambiente, sino también por la inclusión social y la generación de empleo local, al integrar a líderes naturales y actores sociales en la protección activa del patrimonio hídrico de Medellín.
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