La caída en el valor de las ventas al exterior se explica principalmente por la categoría de bienes tradicionales, que presentó una reducción de 47%. Dentro de este grupo, el producto con el desempeño negativo más pronunciado fue petróleo, cuyas exportaciones decrecieron 48,7%, desde US$1.125 millones en enero de 2015 a US$577 millones. Hay que remontarse a marzo de 2009, cuando la producción de petróleo en el país era apenas el 64% de lo que es hoy en día, para ver un nivel inferior de exportaciones de crudo (US$ 568 millones).
La debilidad en los productos tradicionales también se evidenció en carbón, que descendió 43% y marcó su valor exportado mensual más bajo desde marzo de 2013; en café, que después de haber crecido durante casi todo el año anterior descendió 44% en enero; y en ferroníquel, que cayó 61%. Sin duda toda esta categoría acusa un efecto precio muy desfavorable, que fue especialmente aguda en enero por cuenta de la debilidad que presentaron los mercados financieros globales. De hecho, el volumen exportado de estos productos cayó 17%.
Por su parte, en la categoría de exportaciones no tradicionales el descenso fue más moderado (-17,4%) y fue casi por completo atribuible al descenso de los volúmenes vendidos (-16,7%). Frente al valor de las exportaciones no tradicionales (US$849 millones en enero) vale la pena mencionar que hoy en día es 47% superior al de las exportaciones de petróleo, lo que refleja la recomposición de la oferta exportable que se ha producido por cuenta del desplome en los precios del crudo. También es de resaltar que, dentro de las exportaciones industriales, aquellas que acusan una menor caída son las de bienes de alta tecnología (-5,2%), aunque solo tienen una participación de 9,2% en este grupo.
Por principales países de destino, las caídas más pronunciada en las exportaciones se observaron en China (-77%), Panamá (-39,6%) y la Unión Europea (-39%). Por el contrario, se presentó una menor reducción en las ventas a Estados Unidos (-17,4%).
En conclusión, los resultados antes descritos reflejan la manifiesta debilidad del sector externo colombiano, la cual no solo confirma una pronunciada desvalorización de la oferta exportable del país, sino también el hecho de que hasta el momento la depreciación real observada en los últimos años no ha logrado estimular al sector exportador. A su vez, esto puede ser explicado por la baja elasticidad de las exportaciones colombianas, dado que en gran proporción corresponden a bienes básicos, y por la coyuntura de bajo crecimiento global y reducción en los flujos de comercio internacional. La suma de todos estos factores llevó a que en enero el valor exportado estuviera muy por debajo de nuestra estimación promedio mensual para este año (US$2.447 millones), con lo cual el desequilibrio externo se consolida como una de las mayores vulnerabilidades de la economía colombiana.
Fuente: Análisis Bancolombia
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