En el corazón de Medellín, el Instituto de Bellas Artes se transforma en un santuario del tango, acogiendo a niños, jóvenes y adultos de diversas procedencias que encuentran en este género musical una vía para expresar emociones y explorar su pasión por la música.
Bajo el ala de la Secretaría de Cultura Ciudadana de la Alcaldía de Medellín, la Escuela de Tango de la Red de Músicas de la ciudad ofrece una oportunidad única para estudiar y aprender este estilo de música que evoca nostalgia y poesía. La iniciativa, dirigida por la pianista y compositora Sandra Milena Arboleda García, se ha convertido en un faro cultural que ilumina las vidas de cientos de personas en la ciudad.
Con una cobertura que abarca todas las edades, desde niños de tan solo 5 años hasta adultos mayores de 81, la Escuela de Tango se posiciona como una de las más incluyentes de la Red de Músicas de Medellín, brindando formación en áreas como bandoneón, piano, guitarra, violín, canto y contrabajo.
En este espacio, ubicado en el Instituto de Bellas Artes en la avenida La Playa con carrera 42, el tango cobra vida de diversas formas: algunos lo cantan, otros lo tocan con instrumentos musicales, pero siempre hay una presencia constante de la melancolía y la pasión que caracterizan a este género.
Sandra Milena Arboleda García, directora de la Escuela de Tango, destaca la importancia de esta propuesta en una ciudad con una arraigada tradición tanguera. Con un brillo en los ojos, expresa que el tango es más que música, es un estilo de vida, y se alegra al ver el creciente interés de jóvenes por este género.
La Escuela de Tango no solo promueve la formación académica en este estilo musical, sino que también garantiza la conservación y permanencia del tango en la vida cultural de la ciudad. Para aquellos interesados en unirse a esta vibrante comunidad tanguera, solo deben acercarse al Instituto de Bellas Artes y expresar su deseo de formar parte de este proyecto.
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