Más de 300 asistentes entre docentes, coordinadores de instituciones educativas y centros de desarrollo infantil y estudiantes de diversas universidades y planes académicos, que tienen el arte, la recreación y el juego como herramientas pedagógicas en su formación, aprendieron y reflexionaron de manera participativa en las jornadas.
“No solo hemos tenido conferencias magistrales muy enriquecedoras, sino también espacios para la práctica, dejando como reflexión que el juego trasciende la consciencia del ser humano y permite entender y apropiarnos de mensajes que permanecen para toda la vida”, afirma Mónica Domínguez, estudiante de Licenciatura en Educación Infantil.
“La mejor forma de aprender es el hacer”, manifiesta Abelardo Sanclemente, pedagogo y asesor en metodología de procesos formativos, quien tuvo a su cargo la conferencia sobre el juego como elemento social en la primera infancia.
Se socializaron además prácticas y juegos tradicionales del Putumayo y la Amazonía colombiana, gracias a la presencia del ponente Roberto Carlos Imbacuán, quien además de artista plástico, trabaja la danza y la expresión corporal de su región, basada en los colores y la riqueza de la naturaleza.
Asimismo se intercambiaron conocimientos y experiencias en la creación de juguetes y material didáctico para niñas y niños con elementos reciclados y que hacen parte del entorno, gracias a la experiencia relatada por William Ruano y Carolina Forgioni, del Taller de Títeres el Grillote, quienes tienen más de 30 años de experiencia en el desarrollo de procesos artísticos y expresivos de arraigo popular, en varios departamentos del país como Santander y el Cauca.
Los participantes aprendieron, cantaron y jugaron como niños, además de recordar los juegos preferidos de su infancia gracias a los talleristas de la subsecretaría de Primera Infancia.
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